miércoles, 26 de febrero de 2014

La despoblación

Decía un amigo que aquí no cabía un tonto más, y realmente estoy empezando a pensar que es verdad. En una reunión entre esos genios que han logrado (nada menos) que llegar a presidente de su comunidad autónoma han evaluado tan cultivadas materias grises el problema de natalidad que aqueja a sus administrados, o Miembros Con Derecho a Pagar Impuestos, parafraseando a Goscinny.

No han llegado a la conclusión de que no hay apenas ayudas a la natalidad, que además no está especialmente bien vista, ni han hablado de favorecerla con campañas en la que se apele a la hermosa responsabilidad de ser padres, contribuyendo así a nuestra continuidad en este mundo.

No han hablado de las decenas de miles de abortos que hay en España, provocados quizá (sólo quizá) por la egoísta idea de que el cuerpo de las mujeres es su patio de recreo y pueden quedarse embarazadas y después interrumpirlo si en ese momento no les viene bien.

No han hablado de los problemas que tenemos los padres para escolarizar a los niños en un colegio que nos guste, ni de la falta de libertad en la elección de centro. Tampoco de la falta de libertad al elegir la enseñanza en un idioma para aquellos que lo usan siempre, ni de lo absurdo de que a un extremeño le obliguen en Galicia a estudiar en gallego le guste o no.

No han hablado del precio de la vivienda, de la especulación, de la asquerosa corrupción que motiva que se caigan pisos vacíos mientras hay gente en la calle.

Ninguno mencionó el precio de la ropa, de los uniformes escolares, del material escolar, de los cambiantes libros de texto... ni de descuentos en el IRPF o becas para familias numerosas.

No han hablado de que en España no hay apenas ayudas para las familias, ni de que si te compras un coche más grande, una casa más grande o gastas más en ropa ahí te apañes como puedas.

Ni siquiera han hablado de que no existe un discurso social ni político que anime a la gente a tener hijos; antes bien se hace mofa de aquellos que tienen más de uno o dos con frases impertinentes en televisión, cine, series, etc (frases del estilo de ¿No tienes televisión? o ¿Eres del Opus?)

Pero ellos han llegado a una conclusión mucho más inteligentes, doctores tiene la Iglesia, que no se centra en los problemas de los ciudadanos, y se han dado cuenta de que lo que hay que hacer es cambiar la financiación de las comunidades autónomas.

Vamos apañaos.

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