La hermana del tristemente recordado Gregorio Ordóñez, Consuelo, ha emprendido una cruzada que va a perder al acusar a ETA y su entorno de crímenes de lesa humanidad de acuerdo con lo establecido con el Estatuto de Roma, en cuyo artículo 7 se recogen los asesinatos selectivos, la persecución y el exilio forzado, entre otros delitos como el encarcelamiento o privación de libertad, la tortura, el apartheid o la persecución.
A todos nos queda claro que todo esto se ha dado en Guipúzcoa, en Vizcaya, en Álava, en Navarra y en el resto de España, y a todos nos queda claro que ha existido una excepcionalidad democrática en la que se obligó a callar a las víctimas mientras nunca se negó la voz a los culpables.
Gregorio Ordóñez fue asesinado en el bar La Cepa el 23 de Enero de 1995 delante de María San Gil y de varias decenas de personas que no vieron nada, curiosamente. De los tres valientes que cometieron esa gloriosa acción militar de asesinar a un político desarmado mientras comía dos han sido condenados y el otro no ha sido enjuiciado.
En las siguientes elecciones municipales el Partido Popular, con María San Gil de candidata, ganó las elecciones. Gobernó Odón Elorza, del PSE con el apoyo del partido de los asesinos, entre otros, porque ¿Cómo iba a gobernar la derecha en Donosti?
La mujer del asesinado y su hermana han abandonado su tierra. Esta es, extraida de Wikipedia, la biografía del asesinado:
"Su madre es de Terrateig (Valencia) y su padre de Cutanda (Teruel). Su abuelo materno era tratante y fue asesinado por los republicanos el 27 de agosto de 1936 cuando vivía en Gandía. Tras la guerra, su madre, Consuelo Fenollar, se trasladó con su familia a Valencia, desde donde emigró más tarde a Venezuela. Allí en Venezuela conoció al que sería su futuro esposo, Gregorio Ordóñez. En Caracas su padre trabajó de chófer y su madre como empleada de servicio doméstico. Aunque sus dos hijos Gregorio y Consuelo nacieron en Venezuela, su familia se instaló en San Sebastián en 1965 donde montaron una lavandería industrial, y allí Gregorio realizó sus estudios primarios y medios. Durante su adolescencia frecuentó junto con su hermana Consuelo clubes juveniles ligados al Opus Dei. Se licenció en Ciencias de la Información por la Universidad de Navarra en 1981. En 1990 contrajo matrimonio con la profesora Ana Iribar, con quien tendría un hijo en noviembre de 1993."
Dentro de unos meses a toda esta gente le van a decir que el tribunal no es competente porque la Audiencia Nacional ya está investigando. Espero que al menos una conciencia se remueva con toda la porquería que nos estamos tragando, porque ¿Por qué ninguno de los gobiernos que ha tenido España desde 2002 ha denunciado ésto ante la Haya?
http://www.derechos.net/doc/tpi.html
A todos nos queda claro que todo esto se ha dado en Guipúzcoa, en Vizcaya, en Álava, en Navarra y en el resto de España, y a todos nos queda claro que ha existido una excepcionalidad democrática en la que se obligó a callar a las víctimas mientras nunca se negó la voz a los culpables.
Gregorio Ordóñez fue asesinado en el bar La Cepa el 23 de Enero de 1995 delante de María San Gil y de varias decenas de personas que no vieron nada, curiosamente. De los tres valientes que cometieron esa gloriosa acción militar de asesinar a un político desarmado mientras comía dos han sido condenados y el otro no ha sido enjuiciado.
En las siguientes elecciones municipales el Partido Popular, con María San Gil de candidata, ganó las elecciones. Gobernó Odón Elorza, del PSE con el apoyo del partido de los asesinos, entre otros, porque ¿Cómo iba a gobernar la derecha en Donosti?
La mujer del asesinado y su hermana han abandonado su tierra. Esta es, extraida de Wikipedia, la biografía del asesinado:
"Su madre es de Terrateig (Valencia) y su padre de Cutanda (Teruel). Su abuelo materno era tratante y fue asesinado por los republicanos el 27 de agosto de 1936 cuando vivía en Gandía. Tras la guerra, su madre, Consuelo Fenollar, se trasladó con su familia a Valencia, desde donde emigró más tarde a Venezuela. Allí en Venezuela conoció al que sería su futuro esposo, Gregorio Ordóñez. En Caracas su padre trabajó de chófer y su madre como empleada de servicio doméstico. Aunque sus dos hijos Gregorio y Consuelo nacieron en Venezuela, su familia se instaló en San Sebastián en 1965 donde montaron una lavandería industrial, y allí Gregorio realizó sus estudios primarios y medios. Durante su adolescencia frecuentó junto con su hermana Consuelo clubes juveniles ligados al Opus Dei. Se licenció en Ciencias de la Información por la Universidad de Navarra en 1981. En 1990 contrajo matrimonio con la profesora Ana Iribar, con quien tendría un hijo en noviembre de 1993."
Dentro de unos meses a toda esta gente le van a decir que el tribunal no es competente porque la Audiencia Nacional ya está investigando. Espero que al menos una conciencia se remueva con toda la porquería que nos estamos tragando, porque ¿Por qué ninguno de los gobiernos que ha tenido España desde 2002 ha denunciado ésto ante la Haya?
http://www.derechos.net/doc/tpi.html
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