Representantes, representantos y representontos.

Dicen que el Partido Popular va a perder las siguientes elecciones por los casos de corrupción... ¿Como perdió el PSOE las elecciones en los ochenta? Seamos serios: a una barbaridad de ciudadanos del mundo que tienen el mismo respeto a las leyes que el más chorizo de los corruptos le importa tres pepinos que el alcalde tal o el tesorero cual se haya llevado algo o lo haya repartido con un criterio un poco arbitrario, entre otras cosas porque ellos también lo hacen. Conozco a gente que no roba, defrauda, estafa, malversa... porque no tiene oportunidad, pero no nos olvidemos de que aquí en negro cobran nuestras asistentas, inmobiliarias, canguros, médicos, electricistas, camareros, fontaneros... e incluso nosotros alguna vez lo hemos hecho si se ha terciado. Entonces ¿De verdad creemos que alguien va a dejar de votar al partido de sus amores o simpatías por el hecho de que hagan lo mismo que hacemos todos? Nadie cree que perjudique a nadie cuando no satisface cuotas o tasas ¿Vamos a cambiar nuestras intenciones de voto por el hecho de que un político no lo haga tampoco? ¿Cuántos no han pedido a algún amigo un puesto para un allegado que es más majo que ni te lo puedes creer? ¿Quién no se ha hecho objetor de conciencia para no servir a su país? No hay mayor ingenuidad que creer que existe un rechazo social hacia la corrupción: Ojalá existiera y todos sintiéramos desprecio hacia el que no cumpla como todo el mundo; tal vez así podríamos decirles a nuestros representantes -con perdón- que tal cosa no nos gusta o que no queremos pagar lo que sea, pero claro: Ellos que son represen-tantos, no son precisamente represen-tontos.